Palabras de apertura del Director General en la Cumbre de Salud de los PEID: Por un futuro saludable y resiliente en los pequeños Estados insulares en desarrollo - 28 de junio de 2021

28 de junio de 2021

Excelentísimo Sr. Primer Ministro Pravind Kumar Jugnauth, 

Excelentísimo Sr. Presidente Taneti Maamau, 

Excelentísimo Sr. Primer Ministro Frank Bainimarama, 

Honorable Sr. Georges Rebelo Pinto Chikoti, 

Director Ejecutivo Yannick Glemarec, 

Excelencias, distinguidos invitados, queridos colegas y amigos: 

Buenos días, buenas tardes y buenas noches a todos los representantes de los pequeños Estados insulares en desarrollo. Gracias por acompañarnos. 

Quisiera darles una calurosa bienvenida a la Cumbre de Salud de los PEID, la primera reunión de dirigentes centrada exclusivamente en la salud en los pequeños Estados insulares en desarrollo.  

Contamos con una considerable representación de PEID de todas las regiones, así como con las voces de la sociedad civil y de los jóvenes. Espero que el intercambio sea intenso. 

Hoy nos centraremos en ustedes y en las numerosas amenazas para la salud a las que se enfrentan sus naciones. 

La COVID-19 ha provocado una grave crisis económica y de salud en los PEID, mientras que otros riesgos para la salud, como el cambio climático, las enfermedades no transmisibles y la malnutrición han supuesto un peligro aún mayor para sus comunidades. 

A pesar de estos graves riesgos, los PEID han demostrado un verdadero liderazgo en materia de salud, salvaguardando la salud y el bienestar de sus comunidades y, al mismo tiempo, catalizando el impulso político para la consecución de los objetivos mundiales de salud. 

Muchos de ustedes han logrado evitar la transmisión generalizada de la COVID-19 en sus comunidades. 

Pero sé que la pandemia les ha perjudicado mucho y de diversas maneras, como por ejemplo, disminuyendo los ingresos procedentes del turismo, lo que está afectando considerablemente a sus economías. 

El principal obstáculo para la recuperación sigue siendo el acceso equitativo a las vacunas contra la COVID-19. 

A través de COVAX hemos podido entregar hasta ahora dos millones de vacunas a 31 pequeños Estados insulares en desarrollo, así como otros productos de salud esenciales. 

Sabemos que esto no es, ni mucho menos, suficiente para sus necesidades, y estamos trabajando intensamente para encontrar formas de aumentar la producción y la distribución equitativa de vacunas. 

Nos enfrentamos al mismo problema en todo el mundo, ya que las desigualdades en materia de vacunas y el nacionalismo en torno a estas incrementan aún más la división que existe entre las naciones de ingresos altos y las de ingresos bajos. 

Más del 77% de todas las dosis de vacunas se han administrado en tan solo 10 países. 

Mientras tanto, la mayoría de los países de ingresos bajos todavía no tienen suficientes vacunas para sus poblaciones más vulnerables y en situación de riesgo, por no hablar del resto de sus habitantes. 

La OMS trabaja día a día para aumentar urgentemente la producción y la distribución equitativa de vacunas. 

En las últimas semanas hemos observado signos alentadores, como los recientes compromisos de los países productores de vacunas de compartir cientos de millones de dosis. 

Pero eso aún no es suficiente. 

Necesitamos más, y necesitamos que lleguen más rápido.  

También necesitamos ampliar en gran medida la producción local e invertir considerablemente en ella para que el mundo no dependa solamente de unos pocos países en lo que se refiere a la producción de vacunas y la fabricación de otros productos de salud esenciales. 

Pero incluso cuando remita la pandemia, sabemos que muchos de ustedes seguirán enfrentándose a muchos de los problemas de salud que tenían antes del inicio de la pandemia. 

Como saben, una de las primeras iniciativas que pusimos en marcha después de mi elección como Director General en 2017 fue la Iniciativa sobre Cambio Climático y la Salud en los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo. 

En 2019 tuve el privilegio de visitar varias islas del Pacífico, entre ellas Fiji, Tahití, Tuvalu, Tonga y las Bahamas, para observar el impacto que el cambio climático está teniendo en esos países. 

La Cumbre de Salud de los PEID ofrece la oportunidad de impulsar un apoyo específico para un futuro saludable y resiliente en los pequeños Estados insulares en desarrollo. 

Eso significa reforzar la financiación, la capacidad del personal, los datos y las pruebas, y las alianzas entre los PEID. 

Y también queremos asegurarnos de que la OMS preste el apoyo idóneo a los PEID, razón por la cual esta Cumbre es tan importante. 

Permítanme proponer algunas áreas clave en las que la OMS puede ofrecer su apoyo. 

En primer lugar, debemos trabajar juntos por la equidad de las vacunas. Eso significa compartir las vacunas en este momento y también invertir en la producción local y regional. 

Si los países comparten inmediatamente dosis con el Mecanismo COVAX y los fabricantes dan prioridad a los pedidos de este mecanismo, podremos vacunar al menos al 10% de la población de cada país de aquí a septiembre, y al menos al 40% para finales de año. 

Es necesario comenzar inmediatamente a compartir dosis para responder a la escasez de suministro: se necesitan otros 250 millones de dosis de aquí a septiembre. 

La equidad en la vacunación es la mejor manera de controlar la pandemia y conseguir que sus economías vuelvan a estar abiertas y en funcionamiento. 

También necesitamos que se compartan los conocimientos técnicos, la tecnología y las licencias, y que se renuncie a los derechos de propiedad intelectual. Espero que los pequeños Estados insulares en desarrollo apoyen la renuncia a los derechos de propiedad intelectual. 

En segundo lugar, la OMS ha ayudado a los pequeños Estados insulares en desarrollo a movilizar fondos para la adaptación al cambio climático, los sistemas de salud resilientes, la seguridad alimentaria y la preparación y respuesta ante emergencias. 

Sin embargo, muchas de sus naciones aún carecen de financiación para aplicar estas políticas. La OMS ofrece apoyo a los PEID para que utilicen mejor las plataformas de financiación, como el Fondo Verde para el Clima. 

En tercer lugar, podemos colaborar con ustedes para ampliar los servicios integrados de prevención y lucha contra las enfermedades no transmisibles (NCD), en especial la obesidad, la diabetes, la hipertensión y el consumo de tabaco. 

En cuarto lugar, la OMS seguirá respaldando sus esfuerzos para avanzar hacia la cobertura sanitaria universal y reforzar el personal de atención primaria de salud y las plataformas de datos.   

También proseguiremos nuestra labor actual con ustedes para ampliar los sistemas de adquisición mancomunada y de reglamentación. 

En quinto lugar, todos debemos extraer enseñanzas de esta pandemia. 

Debemos hacer todo lo posible para prepararnos, prevenir, detectar y responder rápidamente a futuras epidemias y pandemias, sobre la base de una cobertura sanitaria universal y una sólida atención primaria de salud. 

En materia de salud, no hay seguridad mundial sin seguridad local. 

En la reciente Asamblea Mundial de la Salud, los Estados Miembros de la OMS acordaron celebrar una reunión extraordinaria de la Asamblea de la Salud en noviembre para examinar la propuesta de un tratado contra las pandemias. 

Un tratado fomentaría la mejora del intercambio, la confianza y la rendición de cuentas, y ayudaría a reforzar las capacidades nacionales, regionales y mundiales en aras de la seguridad mundial en materia de salud. 

Esperamos que dicho tratado cuente con el apoyo de los pequeños Estados insulares en desarrollo. 

Todas estas ideas provienen de nuestros debates en los países. Pero queremos asegurarnos de que esta Cumbre se centre en sus prioridades. 

Espero escuchar sus comentarios y sugerencias. 

Como se ha debatido anteriormente, una declaración básica de los PEID puede servir para impulsar la acción a medida que avanzamos hacia la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios, la COP26 y la Cumbre de Nutrición para el Crecimiento, que se celebrará a finales del presente año. 

Gracias.