Información a los medios sobre la misión de la OMS en China y el nuevo ‎brote de coronavirus

29 de enero de 2020

Como saben, acabo de regresar de China. Ayer tuvimos oportunidad de reunirnos con el Presidente Xi Jinping, el Ministro de Salud Ma Xiaowei y el Ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi.

Antes de mi visita, mantuve un contacto prácticamente diario con el Ministro Ma para tratar sobre la respuesta al brote y sobre la ayuda que puede prestar la OMS, porque necesitamos centrarnos en el epicentro del brote para contribuir a evitar que se propague al resto del mundo.

Durante mi visita mantuvimos una serie de conversaciones basadas en la honestidad y el entendimiento mutuos.

Tratamos sobre la colaboración continua para aplicar medidas de contención en Wuhan, medidas de salud pública en otras ciudades y provincias, la realización de nuevos estudios sobre la gravedad y la transmisibilidad del virus y el intercambio de datos y material biológico.

Me sentí muy impresionado y esperanzado por el conocimiento detallado que tiene el Presidente sobre el brote y por su implicación personal en la respuesta, con los que demostró un liderazgo fuera de lo común.

Según me transmitió, las medidas que han tomado benefician no solo a China, sino también al resto del mundo.

Por su parte, el Primer Ministro Li también ha estado en Wuhan para conocer el brote de primera mano y dirigir la respuesta en el terreno. Los esfuerzos de China para contener el brote en su epicentro han sido fundamentales para prevenir una mayor propagación del virus.

China identificó el patógeno en un tiempo récord y lo compartió inmediatamente, gracias a lo cual se han podido obtener medios diagnósticos con rapidez. Están plenamente comprometidos con la transparencia, tanto interna como externa, y han aceptado trabajar con otros países que necesitan su ayuda.

Prueba de ello es su respuesta a los casos notificados ayer en Alemania, tras la estancia en este país, por motivos profesionales, de una ciudadana china procedente de Shanghai. Aunque esta no presentaba síntomas a su llegada, se enfermó poco antes de tomar su vuelo de regreso a China. Ya en su país, se le hicieron pruebas que dieron positivo, al igual que las realizadas a sus padres, que la habían visitado procedentes de Wuhan antes de su partida.

Las autoridades chinas notificaron estos datos de inmediato a sus homólogos alemanes, lo cual permitió que estos actuaran con rapidez.

Este ejemplo ilustra claramente la colaboración de China con la OMS y otros países, sobre la base de los principios de solidaridad y cooperación, para hacer frente a una emergencia sanitaria mundial.

Junto con el Presidente Xi, acordamos que la OMS encabezará un equipo de expertos internacionales que se desplazará a China lo antes posible para colaborar con su Gobierno a fin de conocer mejor el brote y orientar la respuesta mundial.

Se han confirmado un total de 6065 casos, casi el 99% (5997) en China y ha habido 132 fallecidos, todos ellos en este país asiático. Queremos expresar nuestras condolencias a sus familias. Fuera de China no ha habido defunciones y se han confirmado solo 68 casos en 15 países que suman el 1% del total.

La gran mayoría de los casos fuera de China han viajado a este país o han estado en contacto con alguien que lo ha hecho. Hay signos indicativos de que ha habido transmisión de persona a persona fuera de China, si bien se trata de unos pocos casos que están siendo objeto de un seguimiento estrecho.

 

La confirmación de solo 68 casos y la ausencia de defunciones fuera de China se debe, en gran medida, a las medidas extraordinarias que el Gobierno chino ha adoptado para no exportar el virus. Por ello, China merece todo nuestro respeto y agradecimiento. Están adoptando estas medidas a expensas de su economía y de otros factores.

La OMS mantiene una vigilancia permanente del brote en todo momento. Compartimos la preocupación de muchas personas que están preocupadas por su salud y por la de sus familiares y amigos. La aparición de un nuevo patógeno que puede causar enfermedades graves y ser incluso mortal es un suceso grave que debe considerarse con la máxima seriedad.

Eso es, exactamente, lo que estamos haciendo. Ahora más que nunca, debemos basarnos en datos científicos y tomar decisiones racionales y basadas en la evidencia.

Estamos colaborando estrechamente con las autoridades de salud pública de todos los países afectados para hacer un seguimiento de la propagación y la virulencia del virus, y brindamos orientación sobre las medidas de lucha para proteger la salud pública.

El continuo aumento de los casos y las pruebas de la transmisión entre personas fuera de China resultan muy preocupantes. Aunque las cifras correspondientes a todos estos países son, por el momento, relativamente bajas, no se puede descartar que el brote adquiera proporciones mucho mayores.

Por consiguiente, y reiterando mi reconocimiento por todo lo que está haciendo China, he decidido convocar de nuevo al Comité de Emergencia del Reglamento Sanitario Internacional sobre el nuevo coronavirus 2019 para que me asesore al respecto de si el brote representa una emergencia de salud pública de importancia internacional y me recomiende la mejor manera de proteger a la población de todo el mundo.