Buenos días, buenas tardes y buenas noches.
Las vacunas son uno de los inventos más trascendentales de la historia de la humanidad.
Gracias a ellas, la viruela ha desaparecido, la poliomielitis está a punto de ser erradicada y enfermedades antes tan temidas como la difteria, el tétanos, el sarampión y la meningitis se pueden ahora evitar fácilmente.
Además, por supuesto, las vacunas han ayudado a cambiar el curso de la pandemia de COVID-19.
Pero este triunfo de la ciencia se ha visto limitado por las enormes desigualdades en el acceso a estas herramientas que salvan vidas.
Buena parte de esta desigualdad se debe a que la producción mundial de vacunas se concentra en unos pocos países, en su mayoría de altos ingresos.
Así pues, una de las lecciones más evidentes que nos ha dejado la pandemia es la necesidad urgente de aumentar la producción local de vacunas, sobre todo en los países de ingresos bajos y medianos.
Por eso, en junio del año pasado, anunciamos nuestra decisión de establecer en Sudáfrica el Centro de transferencia de tecnología para las vacunas de ARNm, una alianza entre la OMS, Afrigen Biologics, el Instituto de Productos Biológicos y Vacunas de África Meridional (Biovac), el Consejo Sudafricano de Investigación Médica, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de África y el Banco de Patentes de Medicamentos, que cuenta con el firme apoyo de Bélgica, el Canadá, Francia, Alemania, Noruega, la Unión Europea y la Unión Africana.
Se pretende que este Centro sea un establecimiento en que los fabricantes de países de ingresos bajos y medianos puedan recibir formación sobre cómo producir determinadas vacunas, y sobre las licencias que necesitan para hacerlo.
Creemos que el Centro de transferencia de tecnología para las vacunas de ARNm permitirá no solo mejorar el acceso a las vacunas contra la COVID-19, sino también luchar contra otras enfermedades como la malaria, la tuberculosis y el cáncer.
Tuve el honor de visitar el Centro hace dos semanas.
Ya está dando resultados, como el anuncio de que Afrigen ha producido su propia vacuna candidata de ARNm.
Los países de ingresos bajos y medios se enfrentan a algunos obstáculos para producir vacunas de ARNm, debido entre otras cosas a su costo y al hecho de que requiere una cadena de frío cuya puesta en marcha es compleja y cara.
También requiere una mano de obra cualificada y formada.
En la actualidad, la mayor parte de los centros de capacitación en biomanufactura se encuentran en países de altos ingresos y funcionan mediante un sistema basado en el pago de derechos, motivo por el cual están fuera del alcance de muchos países de ingresos bajos.
Por esta razón, la OMS, la República de Corea y la Academia de la OMS anuncian hoy la creación de un centro mundial de capacitación en biomanufactura que prestará servicios a los países de ingresos bajos y medios interesados en producir no solo vacunas, sino también otros productos biológicos, como insulina o anticuerpos monoclonales.
El Gobierno de la República de Corea ha ofrecido una instalación de gran tamaño en la que se imparten actividades de capacitación en biomanufactura de ámbito nacional, y que ampliará sus operaciones para dar cabida a participantes de otros países.
La Academia de la OMS apoyará esta iniciativa ayudando a elaborar un programa de estudios completo sobre biomanufactura.
Los dos primeros países que se unieron el año pasado al Centro de transferencia de tecnología para las vacunas de ARNm fueron la Argentina y el Brasil, y varias empresas de ambos países ya están recibiendo capacitación.
La semana pasada anunciamos cuáles serían los primeros seis países africanos en recibir tecnología para producir sus propias vacunas de ARNm: Egipto, Kenya, Nigeria, el Senegal, Sudáfrica y Túnez.
Hoy anunciamos otros cinco: Bangladesh, Indonesia, el Pakistán, Serbia y Viet Nam.
Esto supone un total de 13 países hasta la fecha, y estamos en conversaciones con varios países más.
Tenemos el honor de contar hoy con cuatro países que ya participan en el centro, y que empezarán a recibir capacitación a partir del mes que viene.
Pero antes, tengo el honor de dar la bienvenida al Excmo. Sr. Dr. Kwon Deok‑chul, Ministro de Salud y Bienestar de la República de Corea.
Ministro Kwon, bienvenido, y muchas gracias por el apoyo de su Gobierno a esta nueva y apasionante iniciativa. Le cedo la palabra.
[EL MINISTRO KWON SE DIRIGIÓ A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN]
Gracias Ministro Kwon, y gracias una vez más por la generosidad con que la República de Corea está apoyando este esfuerzo.
Pasemos ahora a los cuatro países que recibirán del Centro sudafricano tecnología para producir vacunas, y que ya reciben capacitación al efecto.
Comenzamos por la región de Asia Sudoriental de la OMS, en concreto con Indonesia. Es para mí un placer dar la bienvenida a la Excma. Sra. Retno Marsudi, Ministra de Asuntos Exteriores de Indonesia.
Ministra Marsudi, gracias por acompañarnos hoy. Bienvenida, tiene la palabra.
[LA MINISTRA MARSUDI SE DIRIGIÓ A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN]
Terima kasih, Ministra Marsudi. Esperamos seguir apoyando a Indonesia en este proceso.
Entiendo que tiene otros compromisos, así que muchas gracias por acompañarnos hoy.
Pasando a la región de las Américas, tengo el honor de dar la bienvenida a la Dra. Carla Vizzotti, Ministra de Salud de la Argentina.
Bienvenida, Excelencia. Tiene la palabra.
[LA MINISTRA VIZZOTTI SE DIRIGIÓ A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN]
Muchas gracias, Ministra Vizzotti.
Pasemos ahora a Europa. Es para mí un privilegio dar la bienvenida al Dr. Zlatibor Loncar, Ministro de Salud de Serbia.
Excelencia, gracias por acompañarnos hoy. Bienvenido, tiene la palabra.
[EL MINISTRO LONCAR SE DIRIGIÓ A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN]
Hvala, Ministro Loncar. Gracias una vez más por estar con nosotros hoy.
Por último, para la región del Pacífico Occidental, tengo el placer de dar la bienvenida a Su Excelencia el Dr. Nguyen Thanh Long, Ministro de Salud de Viet Nam.
Excelencia, gracias por acompañarnos hoy, y gracias a Viet Nam por participar en esta nueva y apasionante iniciativa. Tiene la palabra.
[EL MINISTRO NGUYEN SE DIRIGIÓ A LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN]
Xin cảm ơn, Ministro Nguyen. Gracias una vez más a usted y a todos nuestros invitados por acompañarnos hoy. Esperamos con interés trabajar con todos ustedes en los meses y años venideros.
Creemos que esta iniciativa es una solución estratégica para los retos a los que nos enfrentamos, por lo que esperamos que dé sus frutos durante muchos años y contribuya a salvar muchas vidas.
Margaret, le devuelvo la palabra.