Buenas tardes a todos.
Permítanme empezar, como siempre, dándoles las últimas cifras.
A fecha de hoy, a las 6 de la mañana (hora de Ginebra), China ha notificado a la OMS 75 567 casos de COVID-19 en total, entre los que hay 2239 víctimas mortales.
En las últimas 24 horas, China ha comunicado 892 nuevos casos confirmados, y 118 víctimas mortales.
La considerable disminución de los nuevos casos confirmados se debe en parte a otro cambio en la forma en que China comunica las cifras.
Como saben, la semana pasada China comenzó a notificar los casos diagnosticados clínicamente, además de los casos confirmados en laboratorio.
Ahora han vuelto a notificar únicamente los casos sospechosos y confirmados en laboratorio.
Esto puede indicar que el sistema de salud de Wuhan ha recuperado la capacidad de analizar todos los casos sospechosos.
Como resultado, algunos casos que se habían confirmado clínicamente se han restado ahora del total porque han dado negativo en las pruebas.
Aunque el número de casos registrados en la provincia de Hubei sigue disminuyendo, nos preocupa el aumento de los casos en la provincia de Shandong, y estamos tratando de obtener más información al respecto.
Fuera de China, se cuentan actualmente 1152 casos en 26 países, y 8 víctimas mortales.
Aunque la cifra total de casos fuera de China sigue siendo relativamente baja, nos preocupan los casos que no presentan un vínculo epidemiológico claro, como por ejemplo antecedentes de viajes a China o contacto con un caso confirmado.
Dejando a un lado el crucero Diamond Princess, la República de Corea registra en estos momentos el mayor número de casos fuera de China, y estamos colaborando estrechamente con el Gobierno para comprender en detalle las dinámicas de transmisión que llevaron a este aumento.
También nos preocupa el aumento de los casos en la República Islámica del Irán, donde se cuentan actualmente 18 casos y cuatro víctimas mortales solamente en los últimos dos días.
La OMS ha suministrado kits de pruebas y va a seguir prestando su apoyo.
Nuestra mayor preocupación sigue siendo la posibilidad de que la COVID-19 se extienda en países con sistemas de salud más frágiles.
Mañana efectuaré una intervención en una reunión de emergencia de ministros de salud africanos, organizada conjuntamente por la Unión Africana y los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades.
Mientras tanto, la misión conjunta dirigida por la OMS en China ha estado trabajando en Beijing, Sichuan y Guangdong, y viajará mañana a Wuhan para proseguir su labor en el epicentro del brote.
Estamos trabajando con todos los socios de la GOARN para salvaguardar la salud de los miembros del equipo y tomar las medidas adecuadas cuando regresen a sus países de origen.
También me complace anunciar que hoy nombramos a seis enviados especiales para la COVID-19, cuyo cometido será brindar asesoramiento estratégico y realizar tareas de promoción y colaboración política de alto nivel en distintas partes del mundo.
Es una satisfacción para mí que las ilustres personalidades que mencionaré a continuación hayan aceptado mi invitación de asumir este encargo:
La profesora Dra. Maha El Rabbat, ex Ministra de Salud de Egipto;
El Dr. David Nabarro, ex Asesor Especial del Secretario General de las Naciones Unidas sobre la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y el Cambio Climático;
El Dr. John Nkengasong, Director de los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades;
La Dra. Mirta Roses, ex Directora Regional de la OMS para las Américas;
El Dr. Shin Young-soo, ex Director Regional de la OMS para el Pacífico Occidental;
Y el profesor Samba Sow, Director General del Centro de Desarrollo de Vacunas en Malí.
Como dije ayer, la principal función de la OMS consiste en coordinar la respuesta mundial a la epidemia, y nuestros nuevos enviados especiales nos ayudarán a cumplirla.
Con esto damos otro paso para aprovechar la ventana de oportunidad que tenemos para contener este brote.
Una vez más, hay que repetir que las medidas adoptadas por China y otros países nos han dado una oportunidad para contener la propagación del virus.
Hacemos un llamamiento a todos los países para que sigan aplicando medidas de contención, al tiempo que se preparan para la transmisión comunitaria en caso de que se produzca.
No podemos mirar atrás en el futuro y arrepentirnos de no haber aprovechado la oportunidad que se nos presenta ahora.
Muchas gracias.