Su Excelencia María Fernanda Espinosa,
Excelencias, estimados colegas:
Quiero expresar mi agradecimiento a los copresidentes del Grupo de Amigos de la Cobertura Sanitaria Universal —Tailandia, el Japón y Georgia— por su continuo liderazgo, y a nuestros otros copatrocinadores por convocar el evento de hoy.
La pandemia de COVID-19 es una poderosa demostración de que cuando la salud está en riesgo, todo está en riesgo, por lo que la tarea de apoyar a los países para que avancen hacia la cobertura sanitaria universal (CSU) es más urgente y más posible que nunca.
Por tanto, me gustaría señalarles tres prioridades:
En primer lugar, tenemos que poner fin a la pandemia y al trastorno que está causando en los sistemas de salud, las sociedades y las economías.
Buscamos el apoyo de todos los Estados Miembros y asociados con el fin de vacunar al 40% de la población de cada país para finales de este año, y al 70% para mediados del próximo.
En segundo lugar, debemos reforzar la arquitectura de salud mundial.
Buscamos el apoyo de todos los Estados Miembros y asociados para alcanzar un acuerdo internacional sobre la preparación frente a pandemias, que se debatirá en una reunión especial de la Asamblea de la Salud en noviembre.
En lugar del caos y la confusión que han alimentado esta pandemia, necesitamos cooperación y colaboración frente a las amenazas comunes.
Y. en tercer lugar, debemos apoyar a todos los países para que inviertan en el fortalecimiento de los cimientos de sus sistemas de salud, y especialmente, de la atención primaria.
Estoy más convencido que nunca del valor esencial de la atención primaria de salud como primera línea de defensa contra los brotes y como vía para promover la salud, abordar todo el espectro de enfermedades transmisibles y no transmisibles y reducir las desigualdades e injusticias.
La OMS mantiene su compromiso de colaborar con nuestros asociados multilaterales a través del Plan de Acción Mundial a favor de una Vida Sana y Bienestar para Todos, con miras a apoyar a los países para que logren una recuperación equitativa y resiliente e impulsar el avance hacia la CSU y los demás objetivos relacionados con la salud para 2030.
Al mismo tiempo, debemos reconocer que muchas de las razones por las que las personas enferman y mueren se encuentran fuera del sector de la salud, por lo que debemos fomentar un enfoque de todo el gobierno y de toda la sociedad para abordar los determinantes sociales, ambientales y económicos de la salud, incluidos los derechos humanos, la igualdad de género y el reto existencial del cambio climático.
Quiero dar las gracias a los ministros de finanzas que se han unido hoy a nosotros, lo que demuestra su compromiso.
Lograr la CSU para 2030 puede parecer un sueño imposible. Pero como todos ustedes saben, y como dijo Madiba, siempre parece imposible hasta que se hace.
Gracias.