La OMS, el PNUD, el PNUMA y el UNICEF se han asociado
para crear un nuevo compendio de 500 acciones destinadas a reducir las muertes
y enfermedades provocadas por factores de riesgo ambiental. Se trata del primer
recurso de este tipo que aúna los conocimientos especializados en la materia de
todo el sistema de las Naciones Unidas.
La contaminación ambiental y otros riesgos ambientales
causan el 24% de las muertes relacionadas, por ejemplo, con cardiopatías, accidentes
cerebrovasculares, intoxicaciones y accidentes de tránsito. Esta cifra podría
reducirse sustancialmente e incluso eliminarse mediante una acción preventiva
audaz a nivel nacional, regional, local y sectorial.
El Compendio de orientaciones de la OMS y
otros organismos de las Naciones Unidas sobre salud y medio ambiente proporciona un fácil
acceso a las acciones prácticas para que los profesionales puedan ampliar sus
esfuerzos por crear entornos saludables que prevengan las enfermedades. Está
pensado para los responsables de la formulación de políticas, el personal de
los ministerios, los gobiernos locales, el personal de las Naciones Unidas en
los países y otros responsables de la toma de decisiones.
El repositorio presenta acciones y recomendaciones para
abordar una amplia gama de factores de riesgo ambiental para la salud, como la
contaminación atmosférica, los sistemas insalubres de abastecimiento de agua,
saneamiento e higiene, el cambio climático y de los ecosistemas, los productos
químicos, la radiación y los riesgos laborales, entre otros.
Solo la contaminación atmosférica provoca 7 millones de
muertes al año, mientras que se espera que el cambio climático contribuya cada
vez más a una amplia gama de impactos en la salud, tanto directos como
indirectos, a través de los efectos en la biodiversidad.
«Fenómenos tales como las altas temperaturas sin
precedentes en América del Norte, las inundaciones masivas en Europa y China y
las devastadoras temporadas de incendios forestales son recordatorios cada vez
más frecuentes y sombríos de que los países tienen que intensificar las medidas
para eliminar los efectos sobre la salud de los factores de riesgo ambiental,»
ha dicho la Dra. Maria Neira, Directora del Departamento de Medio Ambiente,
Cambio Climático y Salud de la OMS. «La aplicación de las medidas del compendio
debería formar parte de una recuperación saludable y ecológica de la pandemia
de COVID y después de ella, y es esencial para alcanzar los Objetivos de
Desarrollo Sostenible. Las Naciones Unidas están aunando sus conocimientos
especializados en materia de salud y medio ambiente para apoyar a los países en
este empeño.»
En el compendio, al que se puede acceder a través de
páginas web interactivas en el sitio web de la OMS y en formato PDF para su
consulta fuera de línea, también se abordan ámbitos prioritarios de actuación,
como las ciudades y los asentamientos urbanos, así como temas transversales
como la salud ambiental de los niños.
«Los niños pequeños son especialmente vulnerables a los
riesgos ambientales, que pueden afectar a su supervivencia y a su salud y
bienestar a lo largo de toda la vida,» dijo Aboubacar Kampo, Director de Programas de Salud del
UNICEF. «Un entorno saludable es un requisito
previo para que los niños estén sanos. Nuestra evaluación indica que puede
prevenir una serie de enfermedades potencialmente letales y, de forma muy
significativa, hasta una cuarta parte de las muertes de niños menores de cinco
años. Además, los entornos saludables funcionan como una atención sanitaria
preventiva y ayudan a reducir los costos médicos innecesarios para las
familias, lo que las permite invertir en el progreso socioeconómico.»
Dos tercios de las muertes atribuidas a los factores de
riesgo ambientales se producen por enfermedades no transmisibles (ENT), como
las cardiopatías, los accidentes cerebrovasculares y el cáncer, lo que hace que
las acciones del compendio sean cruciales para abordar la epidemia de ENT.
El compendio también puede desempeñar un papel importante
en la consecución de la equidad sanitaria, ya que los países de ingresos bajos
y medios son los que soportan la mayor carga medioambiental en todo tipo de
enfermedades y lesiones.
«El compendio puede utilizarse para entablar un diálogo
con los países sobre las prioridades de desarrollo en consonancia con la Agenda
2030 y, de conformidad con ello, orientar los recursos hacia un desarrollo
resiliente, saludable, inclusivo y sostenible,» dijo la Dra. Mandeep Dhaliwal,
Directora del Grupo de VIH, Salud y Desarrollo del PNUD. «Al abordar los factores que causan una
gran carga de la morbilidad en los países de ingresos bajos y medios, el
compendio ofrece a los responsables de la formulación de políticas, al sector
privado y a otras partes interesadas herramientas valiosas con el fin de crear
el cambio transformador necesario para asegurar un futuro saludable para las
personas y el planeta.»
«Es fundamental canalizar las inversiones hacia las
acciones que abordan la triple crisis planetaria del cambio climático, la
pérdida de biodiversidad y la contaminación, que tienen profundas implicaciones
para la salud. Debemos transformar la forma en que valoramos la naturaleza si
queremos salvaguardar la salud y alcanzar los Objetivos de Desarrollo
Sostenible, un cambio importante que requiere esfuerzos multisectoriales y
multiinstitucionales. Este compendio, al poner a disposición herramientas y
metodologías clave desarrolladas por una amplia gama de asociados para el
desarrollo, es un paso importante en esta dirección y en la promoción de
resultados positivos en materia de medio ambiente y salud,» dijo Monika MacDevette, Jefa de la
Subdivisión de Productos Químicos y Salud del PNUMA.
El compendio es un repositorio «evolutivo», esto es, sujeto a actualizaciones y a
las nuevas orientaciones que vayan proporcionando las organizaciones asociadas.
Cada acción se describe brevemente y se remite a la fuente para obtener más
detalles.
En el compendio se hace un llamamiento a los ministerios de salud y a otros organismos a nivel nacional, regional y local para que amplíen las acciones en los países y clasifiquen cada una de las intervenciones señaladas en función de los sectores principalmente implicados, el nivel de aplicación y los instrumentos necesarios, como regulaciones, impuestos y subvenciones, infraestructuras, educación y comunicación, entre otros.