El Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos ha apelado hoy a todos los países para que reduzcan considerablemente los niveles de antimicrobianos utilizados en los sistemas alimentarios mundiales. Ello conlleva dejar de utilizar antimicrobianos de importancia médica para fomentar el crecimiento en animales sanos y usar en general antimicrobianos con más responsabilidad.
El llamamiento llega antes de la Cumbre de las Naciones Unidas sobre los Sistemas Alimentarios que se celebra en Nueva York el 23 de septiembre de 2021 y en la que los países analizarán sus opciones para transformar los sistemas alimentarios mundiales.
El Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos está integrado por jefes de Estado, ministros gubernamentales y dirigentes del sector privado y de la sociedad civil. El Grupo, que se estableció en noviembre de 2020 para acelerar el impulso político mundial, el liderazgo y la acción sobre la resistencia a los antimicrobianos (RAM), está copresidido por las Excmas. Sras. Mia Amor Mottley, Primera Ministra de Barbados, y Sheikh Hasina, Primera Ministra de Bangladesh.
Reducir el uso de antimicrobianos en los sistemas alimentarios es clave para que sigan siendo eficaces
El Grupo de Liderazgo Mundial apela en su declaración a todos los países y dirigentes de diferentes sectores para que tomen medidas audaces que permitan hacer frente a la farmacorresistencia.
Uno de los principales llamamientos a la acción aboga por un uso más responsable de antimicrobianos en los sistemas alimentarios y por la reducción considerable del uso de los medicamentos más importantes para el tratamiento de enfermedades en los seres humanos, los animales y las plantas.
Los otros llamamientos a la acción son los siguientes:
- Poner fin al uso de los antimicrobianos cruciales para la medicina humana en el fomento del crecimiento de los animales.
- Limitar la cantidad de los antimicrobianos administrados para prevenir infecciones en animales y plantas sanos y garantizar que todo uso se realice bajo supervisión reglamentaria.
- Eliminar o reducir considerablemente la venta libre de antimicrobianos importantes para fines médicos o veterinarios.
- Reducir la necesidad general de antimicrobianos mejorando los programas de prevención y control de infecciones, higiene, bioseguridad y vacunación en la agricultura y la acuicultura.
- Garantizar el acceso a antimicrobianos de calidad y asequibles para la salud animal y humana y promover la innovación de alternativas sostenibles y basadas en la evidencia a los antimicrobianos en los sistemas alimentarios.
La inacción tendrá consecuencias nefastas para la salud humana, animal, vegetal y ambiental
Los antimicrobianos (incluidos los antibióticos, los antifúngicos y los antiparasitarios) se utilizan en la producción de alimentos en todo el mundo. Se administran a los animales no solo con fines veterinarios (para tratar y prevenir enfermedades), sino también para fomentar el crecimiento de animales sanos.
Los plaguicidas antimicrobianos también se utilizan en la agricultura para tratar y prevenir enfermedades en las plantas.
Muchos de los antimicrobianos utilizados en los sistemas alimentarios son iguales o similares a los utilizados para tratar a los seres humanos. El uso actual en
humanos, animales y plantas está dando lugar a un preocupante aumento de la
farmacorresistencia y haciendo que las infecciones sean más difíciles de
tratar. Es posible que el cambio climático contribuya también al aumento de la
resistencia a los antimicrobianos.
Las enfermedades farmacorresistentes ya causan al menos 700 000 muertes cada año entre los seres humanos en todo el mundo.
Si bien se han registrado importantes reducciones en el uso de antibióticos en animales en el ámbito mundial, es necesario reducirlo todavía más.
Si no se toman medidas drásticas e inmediatas para reducir considerablemente el uso de antimicrobianos en los sistemas alimentarios, el mundo se dirige rápidamente hacia un punto de inflexión en que los antimicrobianos en los que se confía para tratar infecciones en humanos, animales y plantas dejarán de ser eficaces. Los efectos de ello en los sistemas de salud, las economías, la seguridad alimentaria y los sistemas alimentarios tanto en el ámbito local como mundial serán devastadores.
«No podemos hacer frente a los crecientes niveles de resistencia a los antimicrobianos sin utilizar esos fármacos con más moderación en todos los sectores», señala la copresidenta del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos, la Excma. Sra. Mia Amor Mottley, Primera Ministra de Barbados. «El mundo está en una carrera contra la resistencia a los antimicrobianos, y es una carrera que no podemos permitirnos perder.»
Reducir el uso de los antimicrobianos en los sistemas alimentarios debe ser una prioridad para todos los países
«Utilizar de forma más responsable los antimicrobianos en los sistemas alimentarios debe ser una prioridad para todos los países», declara la copresidenta del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos, la Excma. Sra. Sheikh Hasina, Primera Ministra de Bangladesh. «La acción colectiva en todos los sectores pertinentes es crucial para proteger nuestros medicamentos más preciados, en beneficio de todos, en todas partes.»
Los consumidores de todos los países pueden desempeñar una función esencial eligiendo alimentos procedentes de productores que utilizan antimicrobianos de manera responsable.
Los inversores también pueden contribuir invirtiendo en sistemas alimentarios sostenibles.
También es necesario invertir urgentemente para poner en marcha alternativas eficaces al uso de los antimicrobianos en los sistemas alimentarios, como vacunas y medicamentos de sustitución.
Notas para los redactores
Para concertar entrevistas con miembros del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos y recabar más información, sírvanse contactar: correo electrónico: borgonhaa@who.int
Declaración del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos en relación con el uso de antimicrobianos en los sistemas alimentarios
Los antimicrobianos se utilizan habitualmente en los sistemas alimentarios,[1] lo que afecta a la resistencia a los antimicrobianos en los seres humanos, los animales, las plantas y el medio ambiente. En la aplicación del principio de «Una sola salud», es crucial transformar los sistemas alimentarios para optimizar la salud de los animales, las plantas y el medio ambiente, garantizar un uso responsable y sostenible de los antimicrobianos y, lo que es más importante, reducir la necesidad de utilizarlos y promover la innovación para encontrar alternativas sostenibles y basadas en la evidencia.
Los antimicrobianos son importantes para la salud y el bienestar de los animales y la producción vegetal, por lo que es necesario garantizar el acceso a antimicrobianos de calidad y asequibles. Ahora bien, urge cambiar la situación actual. Si bien se han registrado reducciones considerables en el uso de antimicrobianos en animales en todo el mundo, introducir nuevas mejoras para reducir su uso y velar por que se utilizan de forma responsable y sostenible en los sistemas alimentarios es muy importante y un objetivo que se puede lograr. Aunque es difícil en algunas situaciones, todos los países, sectores y organizaciones deben dar prioridad a esta meta.
Para promover el uso responsable y sostenible de los antimicrobianos en los sistemas alimentarios, el Grupo de Liderazgo Mundial pide lo siguiente:
1. Prevención y control de infecciones
- Todos los países deberían dar prioridad a la prevención y el control de las infecciones, incluidos los programas de agua, saneamiento e higiene, bioseguridad y vacunación en tanto que intervenciones para prevenir y mitigar el riesgo de enfermedades infecciosas y RAM en todos los sectores; y
- Las organizaciones y asociados internacionales de carácter técnico, financiero y de investigación y desarrollo deberían apoyar a los países para que mejoren el acceso y uso de pruebas diagnósticas asequibles existentes y nuevas, herramientas de predicción de enfermedades, vacunas, alternativas no antimicrobianas seguras y eficaces, y una nutrición adecuada para la prevención, el control y el tratamiento de infecciones en los animales terrestres y acuáticos y, cuando proceda, las plantas.
2. Reducción del uso de los antimicrobianos
Todos los países deberían:
- Reconocer la importancia de los antimicrobianos para la salud y el bienestar de los animales y la producción vegetal en sus políticas y marcos normativos nacionales y eliminar el uso de antimicrobianos para compensar la prevención y control inadecuados de las infecciones, la mala gestión y otras deficiencias modificables en la gestión de la salud de los animales y las plantas;
- Reducir considerablemente el uso general de antimicrobianos, en particular los antimicrobianos de importancia crítica y máxima prioridad para los animales terrestres y acuáticos y las plantas;
- Poner fin al uso de antimicrobianos de importancia médica para fomentar el crecimiento, comenzando de inmediato por los antimicrobianos de importancia crítica y máxima prioridad, y continuando con otras categorías; y
- Limitar la profilaxis y metafilaxis antimicrobianas en animales y plantas a situaciones bien definidas, con el objetivo de reducir considerablemente el uso de los antimicrobianos y garantizar que todo uso se realice con supervisión regulatoria y bajo la dirección de un prescriptor autorizado.
3. Supervisión y gobernanza
Todos los países deberían:
- Garantizar la gobernanza eficaz y supervisión profesional de las ventas y el uso de antimicrobianos y la gestión adecuada de los antimicrobianos en todos los sectores, incluida la elaboración y aplicación de directrices basadas en la evidencia para el tratamiento, el control y la prevención; y
- Eliminar o reducir considerablemente la venta libre de antimicrobianos que son importantes para fines médicos o veterinarios y establecer normas rigurosas con el fin de fortalecer y aumentar la supervisión profesional para el uso de los antimicrobianos en animales terrestres y acuáticos y plantas.
Las organizaciones y los asociados internacionales de carácter técnico, financiero y de investigación y desarrollo deberían:
- Establecer mecanismos para mejorar y ampliar el acceso adecuado a antimicrobianos de buena calidad en todo el mundo; y
- Alentar y apoyar el establecimiento y la mejora de sistemas de vigilancia nacionales e internacionales comparables que permitan a los países establecer bases de referencia para el uso de los antimicrobianos y la resistencia a ellos y establecer metas progresivas, ambiciosas, basadas en la ciencia y pertinentes a nivel nacional para el uso responsable y sostenible de los antimicrobianos en todos los sectores.
Antecedentes del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos
El Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos se estableció en noviembre de 2020 y desempeña una función independiente de asesoramiento y promoción mundial con el objetivo principal de mantener el apremio, el apoyo público, el impulso político y la visibilidad del desafío que supone la resistencia a los antimicrobianos en la agenda mundial. La misión del Grupo es colaborar en el ámbito mundial con los gobiernos, los organismos, la sociedad civil y el sector privado a través del principio de «Una sola salud» para asesorar sobre la acción política y abogar por ella para mitigar las infecciones farmacorresistentes a través del acceso y uso responsable y sostenible de los antimicrobianos.
El Grupo está copresidido por las Excmas. Sras. Sheikh Hasina, Primera Ministra de Bangladesh, y Mia Amor Mottley, Primera Ministra de Barbados, e integrado por jefes de Estado, ministros en ejercicio o ex ministros y/o altos funcionarios gubernamentales que actúan a título individual, junto con altos representantes de fundaciones, organizaciones de la sociedad civil y el sector privado. También incluye a los responsables principales de las organizaciones del Grupo Tripartito –la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA)– todas ellas en calidad de miembros por derecho propio.
La Secretaría Conjunta Tripartita sobre la Resistencia a los Antimicrobianos, una colaboración conjunta de la FAO, la OIE y la OMS, hace las funciones de secretaría del Grupo.
Miembros del Grupo de Liderazgo Mundial sobre la Resistencia a los Antimicrobianos
Copresidentas:
- Excma. Sra. Sheikh Hasina, Primera Ministra, BANGLADESH
- Ex ma. Sra. Mia Amor Mottley, Primera Ministra, BARBADOS
Miembros:
- Dr. Hamad A. Al-Batshan, Viceministro de Innovación y Tecnologías Modernas, Ministerio de Medio Ambiente, Agua y Agricultura, ARABIA SAUDITA
- Dr. Hasan Mohammed Abbas Al-Temimi, Ministro de Salud y Medio Ambiente, IRAQ
- Sra. Inger Anderson, Secretaria General Adjunta, Naciones Unidas, y Directora Ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente
- Sra. Tamara van Ark, Ministra de Atención Médica y Deportes, PAÍSES BAJOS
- Prof. António Correia de Campos, ex Ministro de Salud, Profesor Emérito de Economía de la Salud, Escuela Nacional de Salud Pública, Nueva Universidad de Lisboa, PORTUGAL
- Prof. C.O. Onyebuchi Chukwu, ex Ministro de Salud, Profesor de Cirugía Ortopédica, Alex Ekwueme Federal University Ndufu Alike, NIGERIA
- Dr. Guilherme Antônio da Costa Júnior, Agregado Agrícola Superior, Misión del Brasil ante la Unión Europea, Presidente de la Comisión del Codex Alimentarius, BRASIL
- Prof. Dame Sally Davies, Enviada Especial del Reino Unido para la Resistencia a los Antimicrobianos, REINO UNIDO
- Dra. Maggie De Block, ex Ministra de Asuntos Sociales y Salud Pública, y Asilo y Migración, Diputada, BÉLGICA
- Dr. QU Dongyu, Director General, Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura
- Dra. Monique Eloit, Directora General, Organización Mundial de Sanidad Animal
- Prof. Sir Jeremy Farrar, Director, Wellcome Trust, REINO UNIDO
- Dr. Christopher Fearne, Viceprimer Ministro y Ministro de Sanidad, Diputado, MALTA
- Sr. Jean-Christophe Flatin, Presidente de Innovación, Ciencia, Tecnología y Mars Edge, Mars, Inc., ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA
- Sra. Grace Fu, Ministra de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Diputada, SINGAPUR
- Dra. Julie Gerberding, Directora de Pacientes y Vicepresidenta Ejecutiva, Population Health & Sustainability, Merck & Co., Inc., ESTADOS UNIDOS DE AMÉRICA
- Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, Director General, Organización Mundial de la Salud
- Sra. Lena Hallengren, Ministra de Salud y Asuntos Sociales, SUECIA
- Sra. Sussan Ley, Ministra de Medio Ambiente, Departamento de Agricultura, Agua y Medio Ambiente, Diputada, AUSTRALIA
- Sra. Sunita Narain, Directora General, Centro de Ciencia y Medio Ambiente, INDIA
- Sra. Aminata Mbengue Ndiaye, ex Ministra de Ganadería y Producción Animal, ex Ministra de Pesca y Economía Marítima, Presidenta del Consejo Superior de Colectividades Territoriales, SENEGAL
- Prof. Anna Y. Popova, Jefa del Servicio Federal de Vigilancia de la Protección de los Derechos del Consumidor y el Bienestar Humano (Rospotrebnadzor), Médica Jefa de la Federación de Rusia, FEDERACIÓN DE RUSIA
- Sr. Yasuhisa Shiozaki, ex Ministro de Salud, Trabajo y Bienestar Social, Miembro de la Cámara de Representantes, JAPÓN
- Sra. Dechen Wangmo, Ministra de Salud, BUTÁN
- Dr. Jeffrey Scott Weese, Profesor de la Universidad de Guelph, Director del Centro de Salud Pública y Zoonosis, Jefe de Control de Infecciones de la Facultad de Veterinaria de Ontario, CANADÁ
- Prof. Lothar H. Wieler, Presidente del Instituto Robert Koch, ALEMANIA
Pueden consultarse las biografías de los miembros en este enlace.
Pueden consultarse las fotografías de los miembros en este enlace.
[1] Según la definición de la FAO los sistemas alimentarios abarcan toda la gama de actores y sus actividades interrelacionadas que añaden valor relativas a la producción, la concentración, la elaboración, la distribución,el consumo y la eliminación de los productos alimenticios que proceden de la agricultura y la ganadería, la actividad forestal, la pesca y la acuicultura, así como los entornos económicos, sociales y naturales más generales en los que se integran estos diversos sistemas de producción. El sistema alimentario se compone de subsistemas (por ejemplo, el sistema agrícola, el sistema de gestión de desechos, el sistema de suministro de insumos, etc.) e interactúa con otros sistemas fundamentales (por ejemplo, el sistema energético, el sistema comercial, el sistema de salud, etc.).