¿La herencia de un mundo sostenible? Atlas sobre salud infantil y medio ambiente

Visión de conjunto
Los niños están expuestos a muchos ambientes distintos que tienen una profunda influencia en su crecimiento y desarrollo. Las exposiciones medioambientales, tanto nocivas como beneficiosas para la salud, no funcionan por separado, sino que interactúan con determinantes sociales y nutricionales de la salud para influir en la salud y el bienestar del niño. Sean cuales sean los recursos naturales y el nivel de desarrollo económico, para todos los países y todas las comunidades, los niños representan el futuro, el cual debe cultivarse y protegerse. Y dado que los gobiernos analizan la sostenibilidad ante las poblaciones crecientes que requieren agua, alimentos, vivienda y otras necesidades básicas, invertir en la salud de los niños reduciendo su exposición a riesgos medioambientales tiene que ser una prioridad superior. Únicamente en los ambientes saludables los niños tienen la posibilidad de llegar a ser adultos sanos, capaces de enfrentar los desafíos del futuro.
El comienzo de 2016 marcó el inicio de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS); 17 estándares que proporcionan un marco amplio para el desarrollo económico, social y medioambiental. Aunque hemos logrado una disminución sustancial en muertes prematuras de niños y una reducción en las enfermedades transmisibles, se necesita más inversión y medidas para abordar el principal desafío representado por las exposiciones medioambientales. Los ODS enfatizan que la salud se vincula estrechamente a factores como la pobreza, la desigualdad, el cambio climático y la contaminación; es nuestro deber superar las deficiencias estructurales del pasado y actuar abordando dichos factores ahora. Gran parte de los casos de enfermedades por el medio ambiente en niños puede prevenirse en su totalidad; por ejemplo, reduciendo los ambientes obesogénicos, mejorando el acceso al agua y al saneamiento, limitando la contaminación y eliminando de forma segura los residuos químicos.