Mordeduras y picaduras de animales

12 de enero de 2024

Datos y cifras

  • Las mordeduras de animales portadoras de veneno, toxinas o patógenos son una de las principales causas de morbimortalidad en el mundo.
  • Cada año, las serpientes muerden a 5 millones de personas, de las que casi el 50% resultan envenenadas, sobre todo en África y el Asia Sudoriental. En estos casos es preciso administrar un antídoto adecuado de inmediato.
  • Las mordeduras de perro causan decenas de millones de traumatismos cada año. El mayor riesgo lo corren los niños.
  • La rabia, que puede transmitirse por la mordedura de perros, gatos, murciélagos o monos, puede ser grave para la salud.

Panorama general

Las consecuencias para la salud humana de las mordeduras de animales dependen de la especie animal de que se trate y su estado de salud, el tamaño y el estado de salud de la víctima, así como de la posibilidad de acceder a la atención de salud adecuada. Los casos más graves son los que afectan a los niños, teniendo en cuenta además que sufren la mitad de las mordeduras y picaduras registradas. 

Hay animales de muchas especies que pueden morder a las personas, pero las mordeduras de animales domésticos son mucho más frecuentes que las de animales silvestres. Las heridas causadas por la mordedura, si se infectan, pueden provocar enfermedades graves e incluso la muerte. En la mayoría de los casos, la mejor manera de tratar una mordedura de animal es atender a tiempo y correctamente a la víctima y encontrar al animal. Las mordeduras o picaduras preocupantes son las de:

  • serpientes;
  • perros;
  • otros vertebrados, como gatos, monos, roedores y murciélagos, entre otros animales silvestres;
  • invertebrados, como ciertas especies de insectos, arañas, escorpiones, medusas, erizos de mar y rayas.

Mordeduras de serpiente

Magnitud del problema

Cada año, cerca de 5 millones de personas son mordidas de serpientes. Entre 94 000 y 125 000 fallecen por complicaciones relacionadas con ello y 400 000 acaban teniendo alguna discapacidad.

¿Quiénes corren más riesgo?

El riesgo de mordedura de serpiente es mayor en África y Asia Sudoriental, en especial en sus zonas rurales y de pocos recursos, y afectan sobre todo a los trabajadores agropecuarios, las mujeres y los niños.

Tratamiento

Es fundamental ofrecer de inmediato atención médica a la víctima y seguir estos pasos:

  • inmovilizar inmediatamente y por completo la parte del cuerpo afectada y trasladar rápidamente a la persona al centro médico más cercano;
  • limpiar las heridas para reducir el riesgo de infección;
  • no practicar torniquetes ni incisiones en la herida;
  • tratar a la víctima con un antídoto para las serpientes endémicas de la zona;
  • ayudarla a respirar y proporcionarle un tratamiento sintomático; y
  • vacunarla contra el tétanos si no está debidamente vacunada.

Prevención de las mordeduras de serpiente y de sus graves consecuencias para la salud

Para prevenir las mordeduras de serpiente, hay que informar a la población sobre el problema y las medidas preventivas. Se aconseja llevar calzado o botas de protección, no dejar que haya roedores en los almacenes, elevar las camas para que no toquen en suelo y dormir bajo una mosquitera remetida bajo el colchón.

Los trabajadores de la salud deben saber cómo tratar correctamente estas mordeduras, y las autoridades de salud pública y los responsables políticos han de velar por que haya suficientes antídotos inocuos y eficaces a nivel comunitario.

Mordeduras de perro

Magnitud del problema

No se ha calculado la incidencia mundial de las mordeduras de perro, si bien los estudios indican que causan anualmente decenas de millones de traumatismos. En los Estados Unidos de América, por ejemplo, cada año son víctimas de ellas cerca de 4,5 millones de personas. Los datos relativos a los países de ingresos bajos y medianos son más fragmentados, si bien algunos estudios indican que los perros ocasionan del 76% al 94% de las mordeduras de animales.

Las tasas de letalidad por mordedura de perro son más elevadas en los países de ingresos bajos y medianos que en los de ingresos altos debido al mayor riesgo de que la mordedura transmita la rabia, al acceso limitado a la atención adecuada y a la falta de recursos para tratar a los pacientes tras la exposición. Se calcula que la rabia, una enfermedad vírica, mata a 59 000 personas cada año, la mayoría de las veces por mordedura de un perro rabioso. Aunque hay vacunas preventivas y la profilaxis postexposición poco después de la mordedura salva la vida, es una enfermedad mortal y ningún tratamiento funciona una vez que aparecen los síntomas.

¿Quiénes corren más riesgo?

Los niños son el grupo de edad que sufre más mordeduras de perro, sobre todo a la mitad y al final de la etapa infantil. En esta edad es más probable que la mordedura se produzca en la cabeza o el cuello que en la edad adulta, lo que se suma a la mayor gravedad del traumatismo, la mayor necesidad de tratamiento médico y las mayores tasas de mortalidad.

En algunos países, los hombres sufren mordeduras de perro más a menudo que las mujeres. Más del 50% de las lesiones que sufren las personas que viajan son mordeduras de animales, que suelen producirse al intentar alimentar o tocar al animal, si bien un perro rabioso puede atacar espontáneamente.

Tratamiento

El tratamiento depende del lugar de la mordedura, del estado general de salud de la víctima y de si el perro está vacunado o no contra la rabia. Se recomienda confinar al perro y observarlo diariamente durante 10 días bajo la supervisión de un veterinario y en coordinación con las autoridades locales de salud pública. Estos son los principios básicos de la atención:

  • prestar atención médica de inmediato;
  • lavar y limpiar la herida con agua corriente y jabón durante 15 minutos;
  • suturar la herida si el riesgo de infección es bajo;
  • administrar antibióticos como profilaxis si la herida presenta un riesgo alto o la persona está inmunodeprimida;
  • administrar un tratamiento antirrábico postexposición en función del estado de vacunación del perro;
  • vacunar a la persona contra el tétanos si no está debidamente vacunada.

Prevención de las mordeduras de perro y de sus graves consecuencias para la salud

Es preciso informar a la población, sobre todo a los niños, de los riesgos de las mordeduras de perro y de la forma de prevenirlas. Por ejemplo, no hay que acercarse a los perros callejeros ni dejar a un niño sin vigilar cerca de un perro.

Además, los trabajadores de la salud deben saber cómo tratar adecuadamente estas mordeduras. Por su parte, las autoridades de salud y los responsables políticos deben asegurarse de que se combate la rabia en la población canina y de que se dispone de suficientes vacunas antirrábicas para administrarlas en caso de exposición.

Mordeduras de otros vertebrados: gatos, monos, murciélagos y roedores

Magnitud del problema

Mordeduras de gato: los gatos causan entre el 2% y el 50% de las mordeduras de animales en el mundo. Son el segundo grupo de mordeduras más frecuente, después de las de los perros. En Italia, por ejemplo, se dan 18 casos por cada 100 000 habitantes, y en los Estados Unidos 66 000 personas acuden cada año a los servicios de urgencias por esta causa. Estas mordeduras transmiten a menudo la rabia u otras infecciones por bacterias como Bartonella, Brucella, Leptospira y Campylobacter. De hecho, la mordedura de gato conlleva el doble de riesgo de infección que la de perro.

Mordeduras de mono: los monos causan entre el 2% y el 21% de las mordeduras de animales. Según dos estudios realizados en la India, son la segunda mordedura animal más frecuente después de las de perro en ese país. Estas mordeduras pueden contagiar la rabia, infecciones causadas por retrovirus específicos de los monos, el virus del herpes B, el virus de la viruela símica y los bacilos Salmonella y Campylobacter.

Mordeduras de murciélago: los murciélagos son reservorios del virus de la rabia en todo el mundo, pero no es fácil saber si ha habido exposición porque las mordeduras de estos animales no siempre dejan una marca reconocible. Aunque no se ha calculado la incidencia de las mordeduras de murciélago en el mundo, se sabe que es la causa del mayor número de defunciones por rabia en los Estados Unidos, mientras que, en América Latina, las mordeduras de murciélagos hematófagos también pueden contagiar esta enfermedad.

Mordeduras de roedores y otros animales silvestres: las ratas, los ratones, las ardillas, las ardillas listadas y los hurones también causan lesiones por mordedura. Las mordeduras de roedores domésticos no suelen transmitir la rabia, pero sí infecciones por Leptospira, Salmonella y hantavirus.

En los Estados Unidos, las mordeduras de mapaches, zorros y mofetas (zorrillos) se asocian a menudo con la exposición a la rabia. En cambio, las infecciones que pueden transmitir las aves rara vez entrañan un peligro mortal, aunque si se daña un órgano vital puede resultar preocupante.

¿Quiénes corren más riesgo?

Mordeduras de gato: la población más afectada por las mordeduras de gato son las mujeres adultas. No obstante, como ocurre con las mordeduras de perro, la gravedad de las lesiones es mayor en los niños, sobre todo si afectan a la cara, el cuello o la cabeza.

Mordeduras de mono: después de las mordeduras de perro, las de mono son las más frecuentes entre las personas que viajan. Con todo, las personas más expuestas son los veterinarios, los zoólogos, las personas que trabajan en el control de animales o en contacto con animales silvestres, los cazadores, los tramperos y otras personas que puedan entrar en contacto con monos durante su trabajo o sus actividades de ocio.

Mordeduras de murciélago: la exposición a las mordeduras de murciélago suele vincularse a actividades profesionales o de ocio en que se manipulan estos animales, como el control de animales, la veterinaria y la zoología. Además, las personas que viajan a regiones donde la rabia es endémica también corren riesgo.

Mordeduras de roedores y de otros animales silvestres: tener un roedor como mascota expone a un alto riesgo de mordedura, sobre todo al alimentarlo o manipularlo.

Cualquier mordedura de un animal silvestre entraña un riesgo.

Tratamiento

El tratamiento depende de la especie animal, el lugar y la gravedad de la mordedura, las características epidemiológicas de la rabia en la zona y el estado de vacunación contra esta enfermedad del animal. Estos son los principios básicos de la atención:

  • prestar atención médica de inmediato;
  • lavar y limpiar la herida con agua corriente y jabón durante 15 minutos;
  • administrar antibióticos como profilaxis para reducir el riesgo de infección;
  • administrar un tratamiento antirrábico tras la exposición en función del estado de vacunación del perro;
  • vacunar a la persona contra el tétanos si no está debidamente vacunada.

Prevención de las mordeduras de animales y de sus graves consecuencias para la salud

Tanto la población local como los visitantes de zonas con rabia enzoótica deben conocer los riesgos que entrañan las mordeduras de animales y el modo de prevenirlas. Concretamente, conviene vacunar a los gatos domésticos contra la rabia, evitar el contacto con animales silvestres y consultar a un especialista en control de animales o a un organismo de salud pública cuando se necesite.

Los profesionales y las autoridades de salud y los responsables políticos deben asegurarse de que se dispone de vacunas antirrábicas y supervisar el nivel de infección en las poblaciones animales.

Picaduras de invertebrados: insectos, arañas, escorpiones, medusas, erizos de mar y rayas

Magnitud del problema

Las picaduras o mordeduras de abejas, avispas, hormigas, avispones, arañas venenosas y escorpiones pueden tener diversas consecuencias para la salud, desde un malestar leve hasta una reacción potencialmente mortal en las personas alérgicas al veneno del animal.

Las picaduras de especies tropicales de invertebrados, como las medusas, las rayas y los erizos de mar, también pueden provocar diversas reacciones que pueden ser leves o revestir más gravedad y ser potencialmente mortales.

¿Quiénes corren más riesgo?

Las picaduras de insectos conllevan un riesgo importante para las personas con sistemas inmunitarios debilitados o alérgicas a su veneno.

La exposición a invertebrados marinos se puede producir al practicar ciertas actividades de ocio, como nadar, hacer surf o pasear por la playa.

Tratamiento

La elección del tratamiento depende de la especie del animal, el lugar de la picadura, los síntomas clínicos y las reacciones alérgicas que hayan podido aparecer. Estos son los principios básicos de la atención:

  • prestar atención médica de inmediato;
  • en caso de picadura de escorpión, lavar la zona afectada con agua y jabón y aplicar una compresa fría lo antes posible;
  • si la picadura es de un invertebrado marino, lavar la zona afectada con agua de mar y, si es posible, sumergirla en agua caliente (45 C) durante 20 minutos para aliviar el dolor;
  • prestar atención a cualquier signo de dificultad respiratoria, reacción alérgica aguda o anafilaxia;
  • si es necesario, administrar un antídoto adecuado; y
  • administrar antibióticos como profilaxis para reducir el riesgo de infección.

Prevención de las picaduras de invertebrados y de sus graves consecuencias para la salud

Tanto la población local como los visitantes de las zonas de alto riesgo deben conocer los riesgos que entrañan las picaduras de invertebrados y el modo de prevenirlas, como no entrar en contacto deliberadamente con estos animales y llevar ropa protectora durante las actividades al aire libre.

El personal de salud debe saber cómo tratar correctamente estas lesiones y cuáles son los síntomas que pueden causar, incluidas las posibles reacciones alérgicas tras la picadura o mordedura.

Respuesta de la OMS

La OMS trabaja para hacer frente al problema de salud pública que generan las mordeduras de animales.

Información sobre el envenenamiento por mordedura de serpiente.

Información sobre la rabia.

Respecto de las lesiones causadas por la mordedura o la picadura de otros animales, la OMS da prioridad a las iniciativas dirigidas a recopilar datos para ayudar a determinar su incidencia y sus factores de riesgo, promueve que se refuercen los sistemas de salud y la respuesta a las emergencias, y alienta las iniciativas de investigación que se centran en la eficacia de las intervenciones de prevención y las poblaciones más afectadas. 


Referencias

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Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos de América. Los murciélagos y la rabia.