Cifras y datos
- La rehabilitación es una parte esencial de la cobertura sanitaria universal, junto con la promoción de la buena salud, la prevención de enfermedades, el tratamiento y los cuidados paliativos.
- La rehabilitación ayuda a los niños, los adultos o las personas mayores a ser lo más independientes posible en su día a día y les permite participar en actividades educativas, laborales o recreativas o llevar a cabo las tareas que dan sentido a su vida, como atender a la familia.
- Se calcula que en el mundo actualmente hay 2400 millones de personas que tienen alguna afección que podría mejorar con rehabilitación.
- Se prevé que la necesidad de rehabilitación aumente en todo el mundo debido a los cambios en la salud y las características de la población. Por ejemplo, se vive durante más tiempo, pero con más enfermedades crónicas y discapacidad.
- En la actualidad, buena parte de las necesidades de rehabilitación no están atendidas. En algunos países de ingreso bajo y mediano, más del 50% de las personas no reciben los servicios de rehabilitación que precisan. Las emergencias, en particular las derivadas de conflictos, desastres y brotes generan un aumento repentino de las necesidades de rehabilitación y, al mismo tiempo, trastocan los servicios de rehabilitación.
- La rehabilitación es un componente importante de la cobertura sanitaria universal y una estrategia fundamental para lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 («Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades»).
¿Qué es la rehabilitación?
La rehabilitación se define como «un conjunto de intervenciones encaminadas a optimizar el funcionamiento y reducir la discapacidad en personas con afecciones de salud en la interacción con su entorno».
En pocas palabras, la rehabilitación ayuda a los niños, los adultos o las personas mayores a ser lo más independientes posible en su día a día y les permite participar en actividades educativas, laborales o recreativas o llevar a cabo las tareas que dan sentido a la vida, como atender a la familia. Para ello, se trabaja con la persona y su familia con el fin de tratar las afecciones subyacentes y sus síntomas; modificar su entorno y adaptarlo mejor a sus necesidades; utilizar productos de apoyo; educar para fortalecer la autonomía; y adaptar tareas de modo que se puedan realizar con mayor seguridad e independencia. En su conjunto, estas estrategias pueden ayudar a una persona a superar las dificultades que pudiera tener para entender, ver, oír, comunicarse, alimentarse o desplazarse.
Cualquier persona puede necesitar rehabilitación en algún momento de su vida, como consecuencia de una lesión, intervención quirúrgica o enfermedad, o porque su capacidad para funcionar se ha reducido con la edad.
La rehabilitación puede consistir, por ejemplo, en:
- entrenar el habla y el lenguaje para mejorar la capacidad de comunicación de una persona tras una lesión cerebral;
- practicar actividad física para fortalecer la musculatura y mejorar los movimientos voluntarios y el equilibrio en personas afectadas por un accidente cerebrovascular o por la enfermedad de Parkinson;
- modificar el entorno domiciliario de una persona mayor para mejorar su seguridad e independencia en el hogar y reducir el riesgo de caídas;
- instruir a las personas con cardiopatías para que puedan realizar ejercicios de forma segura;
- preparar a una persona para que, tras una amputación, pueda utilizar, colocar y recolocar una prótesis;
- enseñar técnicas de posicionamiento y colocación de férulas para asistir en la cicatrización de la piel, reducir la hinchazón y recuperar el movimiento tras una intervención quirúrgica por quemadura;
- prescribir medicamentos para reducir la espasticidad en los niños con parálisis cerebral;
- proporcionar tratamiento psicológico a las personas con trastorno emocional debido a una lesión medular;
- desarrollar las habilidades sociales de personas con esquizofrenia, trastornos del espectro autista o discapacidad intelectual;
- enseñar a las personas con pérdida de visión a utilizar un bastón blanco;
- trabajar con un paciente en cuidados intensivos con el fin de mejorar su respiración, prevenir complicaciones y acelerar su recuperación tras una enfermedad crítica.
La rehabilitación se centra en gran medida en la persona, lo que significa que las intervenciones seleccionadas en cada caso son específicas de sus objetivos y preferencias. Los servicios de rehabilitación pueden prestarse en muchos lugares diferentes, entre ellos en entornos hospitalarios o ambulatorios, en consultorios ambulatorios de fisioterapia o terapia ocupacional y en entornos comunitarios como la vivienda, la escuela o el lugar de trabajo.
En la rehabilitación participan diversos profesionales de la salud, entre ellos: fisioterapeutas, ergoterapeutas, logopedas, foniatras, fonoaudiólogos, ortesistas y protesistas, psicólogos clínicos, médicos fisiatras y médicos rehabilitadores, y personal de enfermería especializado en rehabilitación. Hay muchos otros trabajadores de la salud, como los médicos generalistas, los cirujanos o los agentes de salud comunitarios, que también pueden desempeñar una importante función en la rehabilitación de una persona.
Beneficios de la rehabilitación
La rehabilitación puede reducir los efectos de numerosos problemas de salud, entre ellos enfermedades (agudas o crónicas), afecciones o traumatismos. Además, complementa otras intervenciones de salud, como las intervenciones médicas o quirúrgicas, y contribuye a facilitar la recuperación y a conseguir el mejor resultado posible. La rehabilitación también puede ayudar a prevenir, reducir o tratar las complicaciones de muchos problemas de salud, como las asociadas a lesiones medulares, accidentes cerebrovasculares o fracturas.
La rehabilitación contribuye a minimizar o retrasar los efectos discapacitantes de enfermedades crónicas como las enfermedades cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, dotando a los pacientes de estrategias de autogestión y de las ayudas técnicas que precisen, o ayudándoles en el manejo del dolor u otras complicaciones. De esa manera, la rehabilitación contribuye al envejecimiento saludable.
La rehabilitación es una inversión rentable en lo que atañe al costo tanto para quien la precisa como para la sociedad en su conjunto. Puede ayudar a evitar hospitalizaciones costosas, reducir la duración de estas y evitar los reingresos. Dado que hace posible que quienes la reciben puedan empezar a trabajar o volver al trabajo y al empleo, o llevar una vida independiente en su casa, la rehabilitación minimiza la necesidad de recibir apoyo financiero y la dependencia de cuidadores.
La rehabilitación es un componente importante de la cobertura sanitaria universal y una estrategia fundamental para lograr el Objetivo de Desarrollo Sostenible 3 («Garantizar una vida sana y promover el bienestar de todos a todas las edades»).
Ideas erróneas sobre la rehabilitación
La rehabilitación no solo está indicada para las personas con discapacidad o con trastornos prolongados o limitaciones físicas. Antes bien, es una parte esencial del servicio de salud que ha de recibir cualquier persona que padezca algún problema de salud, agudo o crónico, alguna limitación o alguna lesión que dificulte sus actividades cotidianas y, por lo tanto, debería estar disponible para toda persona que la necesite.
La rehabilitación no es un lujo ni un servicio de salud disponible solo para quienes puedan permitírselo. Tampoco es un servicio opcional que pueda probarse cuando fallen otras intervenciones para prevenir o curar una afección de salud.
Para que se materialicen todos los beneficios sociales, económicos y sanitarios de la rehabilitación, es necesario que todas las personas tengan acceso a intervenciones de rehabilitación oportunas, de calidad y asequibles. En muchos casos, ello implica empezar con la rehabilitación en cuanto se detecta un problema de salud, y continuar con ella mientras se llevan a cabo otras intervenciones sanitarias.
Necesidades de rehabilitación no satisfechas a nivel mundial
Se calcula que en el mundo hay 2400 millones de personas que tienen alguna afección que podría mejorar con rehabilitación. Dados los cambios que se están produciendo en la salud y las características de la población mundial, se estima que la necesidad de rehabilitación no hará sino aumentar en los próximos años. Se vive más años, se prevé que el número de personas mayores de 60 años se duplique de aquí a 2050, y cada vez son más las personas que padecen enfermedades crónicas, como diabetes, accidentes cerebrovasculares y cáncer. Al mismo tiempo, persiste la incidencia continuada de traumatismos y afecciones del desarrollo infantil (como la parálisis cerebral). Esas afecciones pueden afectar a la funcionalidad de una persona y están vinculadas con niveles más altos de discapacidad, para los que la rehabilitación puede ser beneficiosa.
En muchas partes del mundo, esa creciente necesidad de rehabilitación queda desatendida en gran medida. Más de la mitad de las personas de algunos países de ingreso bajo y mediano que precisan servicios de rehabilitación no los reciben.
Las necesidades de rehabilitación siguen desatendidas en todo el mundo debido a múltiples factores, entre ellos:
- la falta de un orden de prioridades, así como de fondos, políticas y planes de rehabilitación a nivel nacional;
- la falta de servicios de rehabilitación fuera de las zonas urbanas y la existencia de largos plazos de espera;
- los elevados gastos directos y la inexistencia o insuficiencia de medios de financiación;
- la falta de profesionales cualificados para prestar servicios de rehabilitación: en muchos contextos de ingresos bajos y medianos, la proporción es de menos de diez profesionales cualificados por cada millón de habitantes;
- la falta de recursos, en particular tecnología de apoyo, equipo o artículos fungibles.
- la necesidad de más investigación y datos sobre rehabilitación;
- la ineficacia y la infrautilización de las vías de derivación de pacientes a los servicios de rehabilitación.
Rehabilitación en situaciones de emergencia
Los peligros naturales, como los terremotos o los brotes de enfermedades, y los peligros provocados por el ser humano, como los conflictos, el terrorismo o los accidentes industriales, pueden generar enormes necesidades de rehabilitación como resultado de traumatismos o enfermedades. Además, conjuntamente perturban los servicios existentes y afectan especialmente a las poblaciones más vulnerables y los sistemas de salud más frágiles.
Si bien en las orientaciones clínicas y humanitarias se reconoce la importancia de la rehabilitación en las emergencias, esta rara vez se considera parte de la preparación y respuesta temprana de los sistemas de salud. El resultado es que se magnifican las limitaciones preexistentes de los servicios de rehabilitación, la prestación de los servicios de salud es menos eficiente y las personas directamente afectadas corren el riesgo de sufrir mayores trastornos y discapacidad.
Respuesta de la OMS
Para que los servicios de rehabilitación puedan llegar a todas las personas que los necesitan, es preciso adoptar un enfoque que permita fortalecer los sistemas de salud. Para ello, la rehabilitación debe formar parte de la atención en todos los niveles del sistema de salud, incluida la atención primaria, y estar integrada en la cobertura sanitaria universal.
La labor de la OMS se guía por la resolución sobre el fortalecimiento de la rehabilitación en los sistemas de salud, adoptada en la 76.ª Asamblea Mundial de la Salud, que se aplica mediante la iniciativa Rehabilitación 2030 (en inglés), de conformidad con lo solicitado en la resolución.
La labor de la OMS se centra en la prestación de apoyo técnico a los Estados Miembros en los siguientes ámbitos:
- Liderazgo y gobernanza en materia de rehabilitación
- Rehabilitation in health systems (en inglés)
- Financiación de la rehabilitación
- Sistemas de información sanitaria sobre rehabilitación
- Prestación de servicios de rehabilitación
- Personal de rehabilitación
- Fortalecimiento de las investigaciones y los datos científicos en materia de rehabilitación
- Rehabilitation Need Estimator (en inglés)
- Health policy and systems research agenda for rehabilitation (en inglés)
- Boletín de la OMS (en inglés)
- Fortalecimiento de la rehabilitación en las emergencias
La OMS también trabaja para fomentar la promoción de la rehabilitación, por medio de la Alianza Mundial sobre Rehabilitación (en inglés).